miércoles, 18 de septiembre de 2013

Cuatro años sin Miguel Pérez Cazalez

Los 13 Pueblos de Morelos recordamos a nuestro compañero Miguel Ángel Pérez Cazales asesinado el 31 de octubre de 2009 sin que hasta la fecha se haya hecho justicia. Reproducimos un artículo publicado en La Jornada el Sábado 28 de noviembre de 2009.






QUIÉN ERA MIGUEL ÁNGEL PÉREZ CAZALES Y PORQUÉ LO ASESINARON
*Por Francesco Taboada Tabone
El pasado 31 de octubre, Miguel Pérez Cazales se a dirigía a una reunión con el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra para solidarizarse con los presos políticos de Atenco. No llegó a la cita pues fue secuestrado, torturado y asesinado ese mismo día. El crimen descubre el grado de descomposición en el que se encuentra la sociedad mexicana gobernada por una oligarquía represora y escandalosamente temerosa del estallido social que ella misma está provocando. ¿El pecado de Miguel? defender por la vía legal al Área Natural Protegida del Texcal del proyecto de urbanización impulsado por el gobierno de Marco Adame. Cuando la oligarquía empresarial y gubernamental no logran corromper a quienes luchan en la legalidad, proceden a la represión y al asesinato. Los más recientes ejemplos: el adolescente Aldo Zamora Gómez, asesinado en 2007 por defender el  Corredor Biológico del Chichinautzin y Cristóbal Martínez, torturado por impedir la construcción del relleno sanitario en el área de protección forestal conocido como Loma de Mejía. Ambos casos siguen impunes a pesar de que diputados de los tres partidos y procuradores de dos estados se comprometieron a esclarecer estos crímenes. 
Miguel nace el 29 de septiembre de 1959 en la comunidad indígena de Santa Catarina Zacatepec, hoy municipio de Tepoztlán, Morelos. Sus abuelos pelearon al lado del General Zapata en la Revolución Mexicana. Quedó huérfano a los cinco años. Fue criado por su padre, el legendario Inocencio Pérez, quien sirviera a las órdenes de Jaramillo y fuera el principal promotor de la creación del Área Natural Protegida del Texcal que comparten las comunidades de Santa Catarina y Texalpa.  Chencho Pérez era guardián de la tradición oral que considera al Texcal como la principal reserva de agua de la región. Los estudios científicos le dieron la razón y por eso  luchó para preservarlo. Fue asesinado el 27 de junio de 1992 “por órdenes del gobierno” como lo denunció su primogénito Miguel.  A los 18 años, Miguel se alista en el ejército mexicano y  durante esos años protege a su padre ¡del propio ejército!  Desencantado de esa institución, prefiere dedicarse a la agricultura y a la herrería.  Finca su morada en Tetecolala, en la frontera entre los terrenos comunales de Santa Catarina y la Ciudad Industrial del Valle de Cuernavaca, CIVAC. Su casa y la de varios compañeros se construyen para cerrarle el paso al gobierno y a los industriales que pretendían extender CIVAC a los terrenos agrícolas del pueblo indígena.  A la muerte de su padre, comienza su lucha por preservar el Texcal. Funda junto con Saúl Roque y otros compañeros, el Consejo de Pueblos de Morelos y logran detener la construcción de un proyecto urbano sobre los manantiales Chihuahuita, el Salto y Santa Rosa que abastecen de agua a 13 comunidades. Dentro de las actividades político-culturales del Consejo se desempeña como promotor del idioma y la cultura nahua y preside el rescate de  ceremonias ancestrales que se estaban olvidando en algunos pueblos. Peleó también por  la recuperación de la montura del General Zapata para que este preciado objeto volviera a formar parte del patrimonio cultural del pueblo. Juntos, visitamos comunidades en varias partes del centro de la República informando a la población organizada sobre las actividades del Consejo y la necesidad de que nuestro idioma original debiera ser rescatado como lengua de la revolución que viene. En la entrevista que le hice para la película 13 Pueblos en Defensa del Agua, el Aire y la tierra, de la cual es protagonista, Miguel asegura que el levantamiento social en México está muy cerca, pues la contaminación del agua, la crisis alimentaria, producto de la venta de la tierra agrícola para proyectos de urbanización, están provocando el descontento general y la organización de los pueblos. Miguel creía que la lucha de liberación en México es parte de un proceso cíclico que responde a eventos históricos determinantes como los levantamientos armados zapatistas de 1910 y de 1994 y la fundación del Consejo de Pueblos de Morelos. Se solidariza con el movimiento magisterial y apoya a los maestros durante la represión sucedida el 8 y 9 de octubre en Xoxocotla de 2008. También es cofundador en el mismo año de la Asamblea Nacional de Afectados Ambientales. El 1º de octubre de 2008 logra un acuerdo histórico entre las comunidades de Santa Catarina y Texalpa para delimitar el área protegida del Texcal y los límites entre ambas comunidades, terminando así con un conflicto que llevaba 66 años. Este acuerdo fue firmado por las comunidades involucradas y organismos del gobierno federal. El gobierno estatal no participó pues según el testimonio de Miguel a La Jornada Morelos “El gobierno de Morelos lo único que hizo fue meter odio entre los dos poblados para no arreglarnos, por eso, como pueblos originarios, tomamos la decisión de llegar a un acuerdo sin la participación del gobierno de Morelos.” Después de la firma Miguel promovió recuperar 350 hectáreas del Texcal  invadidas por organizaciones con nexos a grupos de gobierno. Nuevamente el gobierno estatal le dio la espalda. Miguel  mencionó en la Asamblea del Consejo de Pueblos. “Es obvio que el gobierno está detrás de las invasiones, sino ya hubieran hecho algo para proteger la Reserva. Pero no importa, por defenderla se sacrificó mi padre y por eso estamos peleando nosotros”.
Ahora el sacrificio lo ofrendó Miguel y parece que el gobierno actuará como siempre ha actuado, protegiendo a los torturadores, a los asesinos, a los invasores, a los constructores… protegiéndose a sí mismo. Pero como dijo Miguel, “la revolución que viene pondrá a cada quien en su lugar.” A él ya no le tocó vivirla, pero su nombre quedará en nuestra memoria y en los libros de historia como un gran luchador social, como un indígena comprometido con su cultura, como un ambientalista ejemplar y como un mexicano honorable. Honrando su memoria, el tercer Congreso de los Pueblos de Morelos, a celebrarse en Coajomulco, Morelos, los días 28 y 29 de noviembre, llevará su nombre.

*Francesco Taboada Tabone es autor de los largometrajes documentales “13 Pueblos en Defensa del Agua, el Aire y la Tierra”, “Pancho Villa, La Revolución no ha terminado” y “Los Últimos Zapatistas”. Es estudiante de la maestría en Estudios Mesoamericanos en la UNAM.


http://www.jornada.unam.mx/2009/11/28/opinion/015a1pol